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Cheburashka - Un Viaje al Centro de la Infancia

Cheburashka es un símbolo de la parte de mi infancia que transcurrió en Rusia, es un personaje de literatura infantil que apareció por primera vez en 1965 en un cuento del escritor ruso Eduard Uspensky. Asimismo es el protagonista de una serie de dibujos animados producidos por Roman Kachanov. Su dulzura entrañable inspira este viaje a los recuerdos más tiernos de la niñez.

CONTEXTO:

EASDGC

FECHA DEL PROYECTO:

3/2011

CATEGORÍA:

Ilustración · Infantil

Mi Corazón...

El centro que todo lo mueve, bombea felicidad, dulzura e ilusión en forma de estrellitas y caramelos a todos los demás órganos de Cheburashka... elemento inspirador de las emociones más profundas.

Mi Estómago...

El lugar donde vuelan las mariposas, esa sensación tan agradable que se siente con la emoción, la felicidad, el amor, ese vértigo del bueno... que despierta con todas las cosas bellas.

Mi Rostro...

El encargado de expresar las emociones. En él se puede leer la naturaleza tierna de Cheburashka, generada por el mecanismo mágicamente engranado que se esconde tras la piel, y que lo hace funcionar.

Mis Oídos...

Por los que entra toda la belleza de la música y es transformada en sueños, euforia, emoción, tristeza y alegría. En toda la magia que sentimos con las combinaciones armónicas y rítmicas de una melodía.

Mis Ojos...

Que observan atentamente el mundo que me rodea y convierten toda su percepción en golosinas y estrellas. Un símbolo de la belleza y la creatividad de una mirada infantil, todavía sin contaminar por las experiencias desagradables de la vida.

Mis Pies...

Que caminan alegres y despreocupados por un mundo que la madurez y las convenciones sociales aún no han tenido tiempo de mancillar. Las clásicas muñecas rusas "nomeacuesto" y el mítico "slinky" ayudan a Cheburashka en su camino.

Mi Cerebro...

Ese laberinto que se encarga de descifrar e interpretar una realidad en ocasiones complicada de comprender. Tiene muchas soluciones, muchas salidas: es todavía libre y no está condicionado por las limitaciones que vamos acumulando a medida que crecemos.

Mi Pulmón...

Cuyas tuercas, engranajes y mecanismos mantienen vivo el constante flujo de ilusión y alegría bombeado por el corazón.

Mi Ilusionador...

Un órgano imprescindible que actúa transformando el flujo central de ilusión en pequeños copos voladores, que reparten la fuerza vital a todas las células que lo necesiten.

Mi Burbujeador...

Un órgano secundario pero sumamente importante, encargado de alimentar a todo el cuerpo de burbujas de colores - y de felicidad.

Mis Brazos...

Extensibles, flexibles, desplegables... su estructura interna se compone de matrioshkas, lo que permite a Cheburashka alcanzar todo lo que se proponga en el mundo.

Mi Cuerpo...

El símbolo por excelencia de mi infancia. Un contenedor dulce y bondadoso que evoca la alegría y la ilusión que nunca debemos perder en nuestro camino hacia la madurez. Nos recuerda que jamás debemos dejar de soñar.

Volvamos de vez en cuando la vista hacia la infancia, pues ello nos regala la visión de un mundo más hermoso, feliz, libre, donde todo es posible y no existe la palabra "límite".